El fracaso es el camino hacia el éxito
Está demostrado que la única forma de dominar cualquier actividad es la práctica. Aprender del “ensayo y error”. Quienes aceptan esta premisa como filosofía de éxito, tienen mayor probabilidad de alcanzarlo que aquellos que sólo sueñan con hacerlo perfectamente.
Los artistas David Bayles y Ted Orland publicaron en 1993 esta historia:
Un profesor de cerámica anunció al comienzo de la jornada que dividiría la clase en dos grupos. La calificación de quienes estaban en el primer grupo dependía de la cantidad de tazas producidas. Los del segundo serían evaluados por la calidad de una sola taza, que debía ser perfecta.
El resultado presentó un hecho curioso. Las tazas de mejor calidad fueron producidas por quienes serían evaluados por la cantidad. Parece que mientras trabajaban, aprendieron de sus errores y mejoraron la velocidad de producción y la calidad del producto. El otro grupo, por el contrario, se enfocó en definir lo que era perfección y cómo alcanzarla. Su resultado: muchísimo barro sin usar.
Para alcanzar el éxito hay que transitar inevitablemente el terreno del fracaso. El que aprende de sus errores, no se equivoca.